Mi profesor de escenografia siempre nos hablo del trabajo de Jorge Suarez en "Manzi, la vida en orsai", y por fin fui a verla hace ya unos cuantos dias.
La obra esta centrada en la relacion sentimental de Homero Manzi con Nelly Omar, tiene como transforndo el contexto politico del primer peronismo y como hilo conductor la obra literaria en el tango y el cine nacional del poeta. Idea y direccion de Betty Gambartes tiene la media justa de emocion, humor y musica. Un libro sobrio, preciso, respetuoso, ameno. Con musica en vivo dirigida por el maestro Diego Vila, algo que se agradece tanto en los musicales auqneu increiblemente haya productores que sigan poniendo la orquesta graba en plena calle Corrientes.
Como siempre, Julia Calvo se roba todas las palmas, excelente actriz, de las pocas que pueden hacer drama y comedia. Es la segunda vez que la veo en un musical (anteriormente la vi en "El diluvio que viene"), y si bien no es cantante, se defiende convicentemente, aunque su punto fuerte es la magnifica interpretacion que hace de la Gardel con polleras.
Lo mejor sin lugar a dudas es la interpretacion de Jorge Suarez, mimetizado con el gran poeta del tango, hace carne el anhelo de dar vida y alma al personaje, su trabajo es un lujo.
sábado, 10 de agosto de 2013
sábado, 27 de julio de 2013
Día internacional del perro callejero
El día que el mundo sea un lugar “habitable” para los
animales, cuando los mares no sean cotos de caza salvaje ni las especies estén amenazadas
por la contaminación, cuando el hombre respete la impenetrabilidad de montes,
bosques y selvas permitiendo que la vida siga su curso, cuando se deje de
alterar las plantas en forma transgénica, cuando no se contamine
caprichosamente el agua, cuando el hombre deje de ser el más cretino que haya
puesto sus pies sobre la tierra, entonces, en ese momento en que los animales
se encuentren en paz, cuando no existan zoológicos con sus celdas, ni acuarios
que los exponen a cruelmente, ni circos con animales; ese día en que se haya
recobrado el equilibrio y cada quien ocupe su sitio, que es lo mismo que decir
que el hombre deje de invadir y arruinarlo todo, entonces, seguramente tampoco
habrá perros callejeros porque ellos son el reflejo de una sociedad que no sabe
del respeto a la vida.
Mariana Lazzarini @M_Lazzarini
lunes, 22 de julio de 2013
"Escandinavia" con Rubén Szuchmacher
A veces se espera hasta las últimas funciones para ir a ver
una obra que está en cartel durante años, y ese fue mi caso con “Escandinavia”
de Lautaro Vila. La obra la protagoniza Rubén Szchumacher, profesor mío de
Puesta en escena, y es codigirida por él y el autor.
Había leído críticas de la obra, y si bien éstas eran muy
fieles a lo mostrado en la función a la que asistí, aún así me sorprendió la
forma en que se encara en un monólogo la pérdida de un ser querido.
No tengo la intensión de hacer una crítica sino de contarlo
mi experiencia frente a la obra que me fascinó. En los tiempos tan crueles que
vivimos, me sorprende la ternura, la ingenuidad y la transparencia para poner
los sentimientos sobre la mesa. Tal vez me esté pegando la edad porque me pego
fuerte. Es bellisima.
Obra: Escandinavia
Autor: Lautaro Vilo
Actuación: Rubén Szuchmacher
Diseño de vestuario: Jorge Ferrari
Diseño de luces: Gonzalo Córdova
Diseño sonoro: Bárbara Togander
Fotografía: Juan Travnik
Asistencia de dirección: Pehuén Gutierrez
Prensa: Debora Lachter
Producción: Paula Travnik
Dirección: Rubén Szuchmacher, Lautaro Vilo
Teatro: El Kafka (Ciudad Autónoma de BUenos Aires)
Alfredo Alcón en "Final de partida"
N o soy nada objetiva, no puedo serlo, para mí es
definitivamente el mejor actor argentino y verlo siempre es un disfrute
tremendo. Alfredo Alcón es único, su carácter dramático, su voz, la forma en
que llena todo el escenario… Verlo no sólo es un lujo, un privilegio y una inevitable
master class, lo que el gran histrón logro es maravilloso: se calza el traje
del personaje que interpreta, lo hace carne y puede decir como si fuera un
simple “Hola, ¿qué tal?” el texto que sea.
FICHA:
Obra: Final de partida
Autor: Samuel Beckett
Adaptación: Francisco Javier
Actúan: Alfredo Alcón, Graciela Araujo, Roberto Castro, Joaquín Furriel
Vestuario: Mirta Liñeiro
Escenografía: Norberto Laino
Iluminación: Gonzalo Córdova
Apuntadores: Lautaro Ostrovsky
Asistencia técnica: Franco Battista
Producción: Complejo Teatral De Buenos Aires, Pablo Kompel
Dirección: Alfredo Alcón
Teatro San Martin, Sala Casacubierta
La obra no es de mis favoritas. “Final de partida” de Samuel
Beckett es nave insignia de un teatro que no es con el que mejor me comunico. Sinceramente,
asistí a la función por el protagonista. Beckett exige al espectador no ser el
espectador clásico, no trabaja con el lenguaje cotidiano del teatro clásico.
No todo es maravilloso, hay algo que en cuanto lo descubrí
me molestó al inicio de la función cuando se quitan los trapos que tapan la “escenografía”,
una gran falta de respeto al señor Alcón que sólo se podía atrever a cometerla el
mismo Alfredo Alcón director.
Obra: Final de partida
Autor: Samuel Beckett
Adaptación: Francisco Javier
Actúan: Alfredo Alcón, Graciela Araujo, Roberto Castro, Joaquín Furriel
Vestuario: Mirta Liñeiro
Escenografía: Norberto Laino
Iluminación: Gonzalo Córdova
Apuntadores: Lautaro Ostrovsky
Asistencia técnica: Franco Battista
Producción: Complejo Teatral De Buenos Aires, Pablo Kompel
Dirección: Alfredo Alcón
Teatro San Martin, Sala Casacubierta
jueves, 25 de abril de 2013
Vigilia votación Reforma Judicial #24A
Soy “cacerolera” de vieja data, desde la terraza de mi casa
y en la calle. Y ayer no fe la excepción, aunque en principio no iba a ir
porque tenía el día muy complicado desde la mañana a la noche, sin embargo a
primera hora de la tarde, y gracias a que ya llegaba tarde a la facultad, decidí
ir al Congreso Nacional. Eran pasadas las 15 hs, y no había demasiada gente, se
nota que si lo había habido antes. Me ubique en la valla frente a la pantalla
que estaba colocada frente al Congreso, a un lado y con el paso de las horas
fui corriéndome hacia el centro.
Entre Ríos/Callao estaban cortadas, al igual que algunas
transversales. Había fuerte vigilancia en la cercanía al Congreso Nacional. En
la esquina de Hipólito Hirigoyen había carros hidrantes de Policía Federal. Los
kirneristas pasaran a la historia por su rejas y sus vayas, ni los militos tenían
tantas… Junto a las rejas del Palacio se colocaron vallas. Rivadavia estaba
cortada con valla altas de rejas, por ahí es la entrada al recinto y ésta sólo
fue permitida para lo diputados, se prohibió el ingreso de los ciudadanos a las
gradas y varios legisladores hicieron saber que incluso a sus propios
colaboradores se le impidió ingresar.
Frente a la entrada principal, junto a las vallas, se
estacionó un camión con acoplado, en donde se colocó una gran pantalla y
parlantes desde los cuales se pudo seguir la sesión. La pantalla se comió
varios botellazos de gente enojada ante el cinismo de varios diputados
oficialistas. Los dueños de la pantalla en varios momentos amenazaron con
cortar la transmisión si seguían tirando botellitas vacías de gaseosas, de
hecho por un momento cortaron la imagen y en otro tramo cortaron el audio, pero
siempre se volvió a transmitir.
Como dueños de casa, los periodistas gráficos se subían al
acoplado en busca de su mejor imagen. Es inevitable sentirse como mono de circo
cuando los teleobjetivos apuntan hacia vos o hacia quien esta a tu lado. Como
siempre, a los periodistas gráficos les importó un cuerno respetar a la gente. En
lo personal tuve durante largo tiempo un objetivo junto a mi cabeza y la única
forma de quitarme de encima al molesto fotógrafo fue interferir su visión con
mi mano, entonces se dio por aludido que me estaba molestando y cambió de
lugar. Peor fue el accionar de una cronista, una mujer de edad avanzada que alucinaba
ser Miss Argentina e iba y venía a lo largo del acoplado, por delante de la
pantalla, durante la sesión. Es decir, vimos una de las sesiones más
importantes de la Cámara
de Diputados con una tarada cruzándose por delante de la pantalla a cada rato. Por
momento la ridícula grababa copetes, a uno de los lados, muy en diva,
totalmente fuera de lugar, y en otro momento, bajo del camión y me dijo al oído
que cantara el Himno porque iban a salir en directo. Me provocó tanto asco su
intento de puesta en escena barata… La gente canto, cuando le dio la gana, y
afortunadamente al margen de estos peleles cuyos micrófonos y cámara no estaban
identificados con ninguna señal de televisión. Tampoco los fotógrafos estaban
identificados, ningún comunicador llevaba gafete o logo en sus equipos de los
medios para los que trabajan.
Desde esa hora hasta la madrugada cuando terminó la sesión había
mucha gente mayor y pocos jóvenes, y apenas quedaban militantes de izquierda. La
sensación generalizada era de gran indignación, algunas señoras tenía fe de que
el oficialismo pudiera no lograr el cuorum para aprobar la ley, y sostenían
unos impresos con la lista de los 12 diputados que si bien no eran de la
oposición, podían –se pensaba- votar en contra. El comportamiento de la gente
fue correcto, sólo un borracho dio la nota, y dos hombres que tuvieron
reacciones muy violentas; llegaron de la nada, quisieron violentar la valla y
luego desaparecieron, propios o infiltrados, su accionar no paso a mayores.
El cinismo de los diputados oficialistas, esa manía de
querer tomar a la gente por idiota con falacias mediocres e insultos al tiempo
que se autoproclaman dueños de la verdad y el amor, porque en Argentina el amor
pasó a ser una de las banderas kircheristas, y según ellos mismos, el odio es
la nuestra, la de los republicanos que nos indignamos ante la corrupción y
prepotencia del gobierno y sus militantes. Por línea general los discursos
oficialistas se acompañaban con cacerolazo y “Uuhhhhh!!” y los opositores con
aplausos, algunos fueron vivados al finalizar su interpelación.
Junto a la pantalla había un cartel con forma de Constitución
Nacional, y parecía cosa de Mandinga pero el viento la volteaba muchas veces
coincidiendo con los discursos oficialistas.
miércoles, 17 de abril de 2013
Cómo se vivió la asunción de Francisco en la catedral metropolitana
Estas son las fotos de lo ocurrido en la catedral metropolitana
cuando fue elegido papa el cardenal Bergolio (hoy Francisco). No las subí en su
momento porque entonces no funcionaba este blog.
La entrada a la catedral estaba abarrotada en la hora de la misa.
Las siguiente imágenes son el la vigilia y acto
inaugural del papado de Francisco el 19 de marzo de 2013. Yo llegué a la Plaza poco rato después de que el papa Francisco llamó a los jóvenes que estaban hacíendo vigilia.
Se colocaron pantallas para poder seguir la ceremonia desde Plaza de Mayo (rectángulo de luz rosado que se ve a derecha)
Al amanecer, Plaza de Mayo estaba abarrotada, todos siguiendo la ceremonia desde las pantallas.
Rápidos fueron los vendedores con los diseños de banderas y demás merchandice.
Esta es la pantalla con la que yo seguí la ceremonia. Estaba ubicada hacia Casa Rosada.
La cúpula que se ve atrás es de la catedral metropolitana.
Terminada la ceremonia la gente se retiró lentamente. En las pantallas quedó la imagen del cardenal Bergolio.
Se colocó una tarima para que pudiera trabajar la prensa. En la hora pico era imposible ingresar/salir de la Plaza y no hubieran podido hacer su tarea si no se hubiera pensado en la tarima.
La gente no quería irse de Plaza de Mayo, se quedaba quieta, caminando...
El Palacio de la Legislatura (municipal) adornado con los colores patrios y papales. El cabildo (monumento nacional) y Casa Rosada en cambio estuvieron indiferentes.
Esta soy yo, cansada pero con cara de feliz cumpleaños :D
Este es el camión de la Fundación Red Solidaria. Aprovechando el acto se solicitó a la gente alimentos no perecederos y ese camión con acoplado gigante ¡¡¡se llenó a tope!!!
Días más tarde, el mismo camión y otros tantos fueron cargados en el mismo lugar, la catedral metropolitana, con donaciones para los damnificados de las inundaciones.
Se cerró el tráfico en las calles aledañas para permitir la circulación de los feligreses que eramos muchísimos, aquí ya estábamos dispersos.
La ciudad vistió el obelisco, monumento más representativo, con los colores papales.
Las publicidades de las empresas que dan al Obelisco estuvieron a tono con el día
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